miércoles, 18 de julio de 2012

Nuevo rol en el camp: Spanish Teacher!

Pues sí, el título de la entrada es cierto y paso a explicarlo. Tal y como conté en la primera entrada, el programa de idiomas que se está llevando a cabo es básicamente de enseñanza de lenguas enteramente oral. Las mañanas no las tenía demasiado ocupadas (por no decir totalmente libres) y me ofrecí para dar unas horas de español a través de una técnica llamada "Drills" dentro del Rassias Programme de la Universidad de Darmouth, que se puede aplicar indistintamente a cualquier idioma. Brevemente, la técnica consiste en, a través del repaso de toda la gramática, española en este caso, y de expresiones comúnmente usadas, el "driller" (persona que dirige los drills) ofrece un modelo (frase) que repite varias veces, intentando teatralizar el contenido para que vayan poco a poco y a la vez, adquiriendo vocabulario. Los niños repiten y más adelante se les pide que vayan cambiando por ejemplo el género, el número, el tiempo verbal, la persona... Hay que verlo, porque cogerle el "tranquillo" es complicado. De hecho estuve varios días asistiendo a clases de drillings en inglés para más tarde ser entrenada. Me dieron el visto bueno y finalmente pude comenzar con mis grupos de español, que son geniales. Son todo niños y niñas americanas divididos en tres niveles. Es motivador porque tienen muchísimas ganas de aprender y durante el día tratan de hablar español, preguntar vocabulario... De hecho para comer se tienen que sentar en una mesa del idioma que estén estudiando, con varios monitores que controlan, como parte de la inmersión en la lengua que están aprendiendo. Hay clases tanto por las mañanas, como por las tardes, hasta las 4, que empiezan las actividades. Creo que me estoy repitiendo, porque en uno de los posts, ya hablé de mi horario aquí. Por tanto, pasamos a otro tema y es que además de clases y actividades, hemos hecho cosas muy divertidas.

Una de las noches, los que están estudiando chino se encargaron de los juegos de después de la cena y todo tenía que tener como temática la cultura china. Así que construyeron dragones chinos con cartones para hacer relevos, utilizamos palillos chinos con los que teníamos que coger trocitos de hielo y hacer relevos con ellos... Otro de lo que hicimos fue grabar unos vídeos musicales para un concurso entre los distintos grupos (tipo MTV). ¡Han quedado fenomenal! Y aquí tenemos un ejemplo de ello!




Otro día hicimos una representación de La Toma de la Bastilla en forma de batalla de globos de agua. También grabamos una mini-película que colgaré en cuanto la subamos a Internet. Fue un día de muchísimo calor y directamente, empapados como estábamos, nos montamos en los autobuses y nos fuimos a pasar la tarde a una laguna con una piscina al lado con trampolines. Un sitio muy original con unas vistas impresionantes. Porque alrededor de la laguna han construido toda una zona recreativa para hacer actividades deportivas, de montaña y acuáticas (Mountain Bike, Voley-playa, Canoas, Natación, Tenis, saltos de trampolín, excursiones...). Nuestro plan fue estar metidos en la piscina o en la laguna  toda la tarde, porque el calor que hacía era horrible. Al llegar tuvimos la cena de gala. Todos los niños se debían vestir con sus mejores galas y los monitores hicimos de camareros. Luego hubo disco y bailamos todo tipo de canciones. ¡Un día muy completo!


Aquí os dejo las fotos y el mapa de la zona recreativa en la que estuvimos, que se llama "Storrs Pond Recreation Area"










jueves, 12 de julio de 2012

New Hampshire y el colegio

Toca el turno ahora de hablar de New Hampshire, el Estado que me acoge que se encuentra dentro de la región que llaman Nueva Inglaterra, al noroeste de Estados Unidos. La capital se llama Concord y la ciudad con mayor índice de población es Manchester (qué originales estos americanos). Preguntando, me han contado que es un Estado muy "forestal" y agrícola. Vamos, que es completamente verde y que aquí no hay rascacielos que valgan. Limita al norte con Canadá, al noroeste con el estado de Maine, Massachussets (con mi querido Boston) al sur y Vermont al oeste, quedando toda la parte este del estado bañada por el Océano Atlántico.

Es gracioso que todos los Estados tengan un lema. En este caso: "Vive libre o muere" que curiosamente es uno de los más conocidos porque habla un poco de lo que sustenta la filosofía política americana, y además porque contrasta mucho con otros lemas pertenecientes a otros estados más conservadores. Es una frase que se le atribuye al General John Stark en 1809, uno de los soldados más famosos de New Hampshire en la Guerra de Independencia de Estados Unidos (1775-1783). El General Stark la utilizó para declinar por carta la invitación a la reunión aniversario para conmemorar la batalla de Bennington, que tuvo lugar en Vermont. 
Otra cosa curiosa de los Estados, es que también todos tienen un nickname o apodo que suelen referir a algo característico de la región. En este caso, el apodo es "The Granite State", el Estado del Granito. Y no hay que ser muy perspicaz para deducir que se debe a la alta concentración de formaciones de granito y a sus canteras. 


Además, New Hampshire es famoso por el ski y otros deportes de invierno, sus espectaculares paisajes otoñales en los bosques (que no tendré la suerte de contemplar), las casitas cerca de los lagos y los deportes de motor gracias al Circuito de New Hampshire, el más importante de toda Nueva Inglaterra. 

Tras estas batallitas históricas y culturales que a lo mejor os resultan algo aburridas, pero que vienen bien para situarse y aprender algo nuevo, paso a contar dónde estoy alojada este mes. Bueno, pues mi casa durante este tiempo es lo que en invierno sirve como Internado. En España esto nos suena a alumnos problemáticos que no los aguantan en sus casas y de ahí que permanezcan internados. Pues bien, aquí es todo lo contrario. Para cambiar el chip, la idea es tipo Hogwarts (dejando castillos y magia a parte). Es un campus bastante grande con edificios que alojan clases, comedor, dormitorios, Iglesia, casas de los profesores que viven aquí permanentemente... Es como un pueblo. De hecho tenemos hasta una tiendecita y todo. Hay un huerto, un invernadero, múltiples campos de fútbol y ¡hasta un lago!. Iré haciendo fotos, que aunque no se aprecian igual que en la realidad, sí sirven para hacerse una idea de las dimensiones y de lo alucinante que es esto. Ni qué decir tiene que las clases cuentan con todo tipo de tecnología punta: Último modelo de pizarra digital, cámara retroproyectora para que todo lo que haga el profesor en la mesa se pueda reflejar en la pantalla, mesas para los alumnos con su propia entrada de enchufe para su ordenador personal, clases separadas por asignaturas y decoradas acorde con ellas... Vamos, todo un lujo para aprender y pasárselo en grande. 



Para que os hagáis una idea, os dejo la foto del campus. Por cierto, el colegio, que se me ha olvidado antes, se llama Kimball Union Academy, KUA para los amigos y para sucesivas entradas.

Dejo también un enlace de un vídeo-tour por el colegio. Está en inglés, así practicáis, que no viene nada mal. ¡Hasta la próxima!


Campers... ¡allá vamos!


Sé que no está bien hacer grandes saltos en los blogs, por eso de que puedo provocar que el lector se pierda en la línea del tiempo, pero haber pasado un último curso de carrera muy ajetreado no me ha permitido dedicarle a la escritura todo el tiempo que se merecía... Por tanto aquí estoy, una vez más tratando de contar por qué he vuelto a cruzar el charco. La historia no es demasiado larga y se puede resumir en lo siguiente: me han ofrecido venir como staff a un campamento internacional con un grupo de españoles en el estado de New Hampshire, a 2 horas y media de Boston. Sé lo que estás pensando: "¡Una experiencia increíble!". Has dado en el clavo, porque así es.

El lunes, en el aeropuerto de Barajas, conocí por primera vez a estos 12 niños y niñas españoles de entre 13 y 16 años, que iban a convertirse en mis "protegidos" durante casi un mes. Tras despedirse de sus padres, nos adentramos los 13 en nuestra experiencia americana.

Por situar un poco al lector, trataré de describir en esta primera entrada en qué consiste el camp y mi trabajo aquí. Pues bien, organizado por americanos, este camp trata de ser una inmersión lingüística para niños de todo el mundo dispuestos a aprender inglés, francés, español o chino con un método llamado Rassias basado en hablar, escuchar y vivir la lengua que se quiere aprender. Algo muy interesante y de lo que estoy aprendiendo muchísimo.

Como me preguntará mi abuelo cuando vuelva, voy a hacer un breve esbozo de lo que es un día normal en KUA (que es como se llama el colegio que nos aloja: Kimball Union Academy). Por las mañanas, a las 9 y tras un copioso desayuno americano, los niños entran en las clases del idioma que han escogido para todo el programa, hacen un descanso y a las 12, comida. Tras la comida, las clases siempre tienen preparado un show acorde con la cultura que estén estudiando, por ejemplo los que estudian español, hoy hicieron un baile mexicano muy divertido. Todo muy americano, con todos los medios técnicos habidos y por haber, con  gritos de júbilo y hurras a lo "yonkie" al terminar cada show, con los clásicos golpes en la mesa imitando el "We will rock you"... ¡AUTÉNTICO! Tras un rato de descanso, los niños vuelven a clase hasta las 4,00 PM que merendamos y comienzan las actividades de la tarde, a elegir entre: Arte, Fútbol, Cerámica, Baile, Baloncesto, Atletismo, Natación (en un lago) o excursión por los alrededores. Ducha, cena y más actividades de tipo lúdicas (grabar un vídeo musical, hacer mosaicos con caramelos... y a ver con qué más nos sorprenden). A las 9,30 PM todo el mundo en sus edificios de habitaciones. Niñas en un lado, niños en otro. Terminantemente prohibido salir a partir de esa hora, bajo expulsión y "repatriación". Un lujo, vamos, porque dormimos casi 10 horas todos los días.

Las nacionalidades de los niños que están aquí: americanos, chinos, franceses, italianos y españoles. Son los americanos los que más abundan y eligen español, francés o chino para aprender. Los asiáticos y europeos han elegido inglés, a excepción de uno de mis niños que está estudiando chino (es un crack).

Esto es todo por hoy. Iré contando más cosas y colgaré fotos para que os hagáis una idea de lo alucinante que es el sitio en el que estamos.

jueves, 12 de abril de 2012

Oh, oh... ¡Se me pasó el arroz!

Sin quererlo ni beberlo me he plantado en el mes de abril y la segunda entrada de "New York, New York" se quedó en el tintero... Lo cierto es que tras mis locas 24 horas en la ciudad de los rascacielos, las dos últimas semanas en Boston pasaron volando. Llegué a España y la rutina y la falta de tiempo pudieron conmigo. Esto no significa que no vaya a seguir contando mis peripecias por tierras americanas. Tiempo al tiempo. En breve continuaré con más y mejores aventuras. Y no sólo de Boston. Porque las Navidades me devolvieron la oportunidad de volver a cruzar el gran charco para aterrizar en Miami... Esto promete.

martes, 4 de octubre de 2011

New York, New York! (Primera parte)

No tengo palabras para explicar qué siente uno cuando pone un pie en Nueva York. Cuando la gente me pregunta con qué otra ciudad la puedo comparar, mi respuesta es siempre la misma: Es incomparable. Es un sitio en el que uno se siente como en casa porque lo que vemos ya nos suena de haberlo visto más de una vez en la pequeña o gran pantalla. Es la ciudad que nunca duerme, la ciudad de los rascacielos, la metrópolis por excelencia y aquella a la que uno siempre quiere volver. O por lo menos... ¡yo vuelvo!. Mi viaje fue relámpago porque no encontré ningún sitio asequible y seguro para dormir. El autobús sale tirado de precio, porque el viaje de ida y vuelta cuesta 30$. Hay distintas compañías (entre ellas dos chinas) que viajan desde South Station, hasta distintos puntos de la Gran Manzana. Los autobuses tienen wifi, no son especialmente incómodos y además hay una amplia variedad de horas de salida tanto desde Boston como desde Nueva York.

Salimos un viernes a las 11,30 de la noche de Boston. El viaje dura entre 3 y 4 horas, dependiendo del tráfico. Tras preparar nuestro recorrido (me compré una guía de bolsillo muy pequeñita y super útil en Madrid, que fue nuestra gran aliada, porque venía con mapa incluido), hinché mi cojín de viaje y a dormir. Llegamos a Chinatown hacia las 4 de la mañana y he de decir que parecían las 12 del mediodía ¡Una actividad! tráfico, gente por la calle, tiendas abiertas... Nuestro primer objetivo de tan larga jornada era recorrer el puente de Manhattan hacia Brooklyn y hacer el camino contrario pero esta vez atravesando el puente de Brooklyn. Decidimos hacerlo en primer lugar, para poder ver el skyline de noche. Las fotos tienen poquísima calidad, pero creo que nada más empezar a cruzar el puente de Brooklyn, abrí la boca y no la cerré. ¡Qué espectáculo!. Esos edificios tan impresionantes, llenos de luz, la mezcla de colores y el reflejo de todo ello sobre la superficie del río... Llegamos otra vez a Manhattan y encontramos un Dunkin Donuts abierto, donde esperamos con un café caliente hasta que amaneciera.

Con los primeros rayos del sol, nos pusimos en marcha en dirección al World Trade Center, Wall St., y la estatua de la Libertad. ¡Qué impresión causa ver que los edificios que rodean la zona cero, diez años después, los siguen reconstruyendo!. Hay obreros trabajando día y noche y aún así, esta zona, no ha recuperado la normalidad. La estatua de la Libertad la vimos desde el puerto pues era demasiado pronto para coger el barquito hacia la Isla. Eso queda pendiente para mi próxima visita. Desde allí, enganchamos el inicio de Broadway Street y ¡a andar!. Recorrimos los barrios de Soho, Tribeca, Little Italy. Todo a marcha rápida que aún quedaban muchas cosas por ver y hacer. En cierto momento del recorrido, Broadway se cruza con la Quinta Avenida (¡Qué bien suena ésto!), y tras un desayuno buenísimo en una especie de mercado italiano con todo tipo de productos frescos, nos pusimos otra vez en marcha... ¡camino al Empire State!. Casi llegando a Madison Square y con el Empire como telón de fondo, nos topamos con el Edificio Flatiron. ¡Qué ocurrente y bonito! Me encantó. Aparentemente, tiene pinta de un edificio cualquiera si uno va caminando por Broadway o por 5th Avenue... pero cuando se llega a la esquina del mismo, impresiona ver que ¡sólo tiene dos metros de ancho! Caminando desde Madison Square ya se puede ver muy de cerca el Empire State, porque apenas restan 200 metros hasta la puerta principal. Y hacia ahí nos dirigimos.

Con una mezcla de nerviosismo y ansiedad por llegar arriba cuanto antes, cruzamos la puerta de este gran edificio. Aviso a navegantes, y posibles visitantes de Nueva York: compensa comprar los tickets por Internet, en la página oficial del Empire. Una vez dentro del edificio hay unas máquinas en las que poniendo nuestro apellido y el número de reserva que nos mandaron al e-mail, podemos imprimirlo. Está todo muy bien organizado. Primero se sube al piso 80, donde hay un mini-museo con fotografías, planos de construcción, medidas... y de ahí subimos al piso 86, ¡que sólo nombrarlo da vértigo! Creo que no voy a ser capaz de explicar con palabras lo que se siente en el momento de ver que estás a una distancia considerablemente alta del suelo, con la ciudad de Nueva York a tus pies. Si de onomatopeyas se tratara la cosa, la más apropiada para describir este estado sería un "Wooooooooooooooooooow!" (en español un "guau" muy largo) abriendo mucho los ojos y la boca. Dejémonos de tonterías, hay que verlo y punto. Creo que de la emoción que sentía, me olvidé que tenía una cámara de fotos para inmortalizar esas vistas. En ese momento sólo me atrevía a contemplar, que no mirar. ¡Qué bonito!. Bajé a la cruda realidad cuando una pareja de enamorados me pidió que por favor les hiciera una foto. A partir de ese momento, saqué yo mi olvidada cámara y a disparar sea dicho. Desde distintos ángulos, hacia varias orientaciones, con más o menos zoom... ¡Qué pasada de ciudad! Cuando quise mirar el reloj, me di cuenta que había pasado casi una hora y algo, que por cierto se me hizo cortísima. Me hubiera quedado allí mucho más rato, pero nos quedaban muchas más cosas por ver. Dejo aquí algunas de las capturas de estas primeras horas en Manhattan y finalizo aquí la primera de las dos entradas sobre mi viaje. En breve, ¡más y mejor! Esta ciudad no defrauda.

Puente de Brooklyn

Vista del puente de Manhattan desde el de Brooklyn

World Trade Center still under construction

La Bolsa de NYC

Statue of Liberty!



Edificio Flatiron

Con el Empire State de fondo, desde Madison Sq.

Edificio Chrysler

Vista del World Trade Center. Falta algo...

La estatua de la Libertad se ve de fondo

¡Qué bonito!

Times Square por ahí en medio y de fondo Central Park

Mi prima en Polonia... ¡también con blog!

Por si queréis leer más aventuras por otras latitudes, pero escritas en este caso por una Canosa de nombre Blanca... ¡aquí os dejo el enlace!. El caso es viajar con la imaginación, ya que las circunstancias familiares, de trabajo, etcétera, no lo permiten...

http://blankienpolski.wordpress.com/

Tengo esto un poco abandonado, lo sé. Estoy en mis dos últimas semanas, aprovechándolas a tope y sin apenas tiempo para escribir. Además, la crónica de Nueva York me está llevando más tiempo que el resto. Me gustó tanto, y quiero contar tantas cosas sin aburrir al personal... En fin, pronto lanzaré el bombazo... ¡quizá esta noche!

martes, 27 de septiembre de 2011

A scavenger hunt... ¡Una gymkhana por la ciudad!

¡Pues sí! suena emocionante, y así fue. Hoy en clase, nuestro profesor nos propuso hacer una gymkhana por toda la ciudad. ¡Estos americanos son la bomba! Antes del descanso, nos explicó en qué iba a consistir. Nos daba hora y media para completar el mayor número de pruebas posibles. No fue divertido, ¡fue divertidísimo! Las pruebas, como os podéis imaginar, fueron de los más variopinto. Debíamos traer pruebas de cada una de ellas, cuando no fotografías. Lo más gracioso del asunto, es que en mi clase yo soy de las más jóvenes. Justo esta semana he compartido mesa con empresarios alemanes y suizos que han venido unas semanas a perfeccionar su inglés. Los alemanes parecen serios ¿verdad? Pues, ¡todo lo contrario! disfrutaron incluso más que yo. Como me imagino que estaréis expectantes con las pruebas que tuvimos que completar, colgaré el papel que nos dieron y luego traduciré, por si alguien tiene alguna pequeña "dudilla", y así os evito el tedioso trabajo de usar el traductor de google que, dicho sea de paso, es peor que un dolor de cabeza.



-Una factura de 50 céntimos de gasolina
-Un vaso de café desechable con el logo de la cafetería en cuestión firmado por uno de los empleados
-La carta de un restaurante de comida para llevar
-Un bolígrafo de propaganda (debe tener información de la empresa en él)
-Un sello de 5 céntimos
-Un recorte de periódico con algún evento para mujeres
-Una moneda de 1980 (de cualquier valor)
-Una receta casera de algún ciudadano de Boston
-Una fotografía de una matrícula de otro Estado
-Un formulario de un seguro de viaje
-Un sobre para realizar un ingreso bancario
-El número de teléfono de una cabina en................. (dirección)
-El mejor precio de un bistec de ternera de toda la ciudad
-¿Qué restaurante es el que abre hasta más tarde durante las noches de los sábados?
-¿Cuánto cuesta la Piña colada en el bar del barrio?
-Un cupón de descuento de una pizzería
-Una sombrilla de cocktail (las típicas chinas)
-La tarjeta de visita de un vendedor de cosméticos
-La tarjeta de visita de un ginecólogo

Tomar fotos de lo siguiente:
-Alguien paseando a su perro
-Un miembro del equipo echando gasolina en un coche ajeno
-Un extraño cantándole a un miembro del equipo
-Alguien con más de 4 niños
-La casa más pequeña que podáis encontrar
-Un graffiti en el lavabo de algún negocio
-Alguien con 85 años o más (sujetando su carnet de identidad)
-El equipo compartiendo una lata de refresco (cada uno con su propia pajita)
-Un guardia de policía local
-La limusina más larga (o coche) que podáis encontrar

Como podéis ver, imaginación al poder. Pero lo mejor de todo, es la capacidad de ayudar y de involucrarse que tienen los americanos. ¡Es una gozada! Nada más llegar a algún sitio para conseguir alguna de las pruebas, y contar qué estábamos haciendo, no sólo nos ayudaban con su propia prueba, sino que además nos decían dónde podíamos encontrar cualquier otra hasta incluso usando internet, acompañándonos un rato por la calle para tratar de agilizar... ¡buenísimo!. Algunas las dimos por perdidas como las de la gasolina, porque nos iba a llevar mucho tiempo llegar hasta la más cercana. Con otras, como la de preguntarle a alguien su edad (más de 85) pensábamos que nos íbamos a jugar el tipo. Los educados de la alemana y el suizo de mi equipo me dejaron a mi la tarea, que "como eres española, te atreves a preguntar eso" pero no fue tan complicado. Fuimos a Boston Common, porque allí sería fácil encontrar muchas de las pruebas, y de repente, ante nosotros, apareció una familia con una mujer bastante mayor en una silla de ruedas. Ni corta ni perezosa, a ellos me lancé con la mejor de mis sonrisas y haciéndole la envolvente de mi exótica proveniencia (todo país que se encuentre fuera de los márgenes de las costas americanas, es aquí reconocido como de otro mundo, y al fin y al cabo España la salerosa, donde nos pasamos el día bailando, comiendo jamón, bebiendo vino y tomando el sol... ¡no iba a ser para menos!). Conseguí mi ansiada fotografía con mi amiga abuelilla más contenta que unas castañuelas y muy orgullosa de su edad. ¡No fue para tanto!. Pediré la fotografía para colgarla, porque merece la pena. Mientras, dejo la que pude hacer yo con mi cámara: Todos los miembros del equipo bebiendo de una lata de refresco con una pajita.

En mi equipo: Niccola (alemana), Johan (suizo), Marwah (Saudí) y yo (española y a mucha honra)